ACCIDENTE
Hoy, 29 de junio
del año 2004
es preciso informar
una triste noticia:
circulando sin prisa
por la mano
debida,
al volante de un sueño
como todos los días,
un crédulko incurable,
ingenuo diplomado,
colisionó sin
suerte
contra la realidad.
La abismal diferencia
entre los dos actores,
hizo que fueran vanos
los múltiples
esfuerzos
para salvar al menos
las ganas de confiar
en otras madrugadas.
Sin ceremonia alguna,
le dieron sepultura
a
la última ilusión
que respiraba,
quedando lo demás
es decir huesos, carne,
sistemas conocidos
y aspecto singular,
en
estado normal
para estos tiempos...
PASOS
Miro
apagarse el día en cada estría
del cielo que sonroja su bostezo
y quedo en algún punto del silencio
que grita el
horizonte en sus reflejos.
Esta inefable sensación me atrae
a develar el próximo misterio,
desanudo mis pasos
y los suelto
para que desmenucen el desierto,
enorme y sin embargo tan pequeño
que cabe en la sombra de una lágrima.
El
pincel de la mirada nunca acepta
lo inviten a danzar cuando hay tormenta.
MANIFIESTO
Tengo
guardado en un sector
ajeno a los olvidos,
intacto, tu paisaje amaneciendo
cuando aún no existía
la palabra
nosotros,
para desalojar viejos desiertos
nacidos al correr de soledades.
Cuando nada indicaba,
que hubiera
un chaparrón de buena suerte,
capaz de regalarme la tibieza
de tus ojos marrones sin censuras,
para que dialogaran
con los míos
antes que las palabras arreciaran.
Han sido tan frecuentes
los golpes a la dicha que uno teme,
ser feliz y dejar
que vuelen las palomas con guirnaldas
pendiendo de sus alas
para que el mundo sepa del milagro
más vital y buscado de la historia.
De todos modos fuimos
con las velas henchidas,
a fuerza de querernos,
atacando los vientos y corrientes,
para dejar atrás cualquier ausencia
que intentara opacar
el fresco amanecer
de nuestras horas.
En tanto el tiempo juega,
sin el menor apego ni respeto,
con cada pretender que uno dispone.
Su paso impersonal no se detiene,
aunque estalle de pronto el Universo,
mucho menos aun ha de fijarse
en algo
imperceptible a casi todos,
como es cualquier amor dado a su vuelo.
Nosotros enfrentamos los pronósticos
y
hemos llegado al punto del misterio,
donde todo es igual, todo es distinto,
donde la noche es día y viceversa,
donde
hay que dar a luz nuevos anhelos,
para ahuyentar fantasmas escondidos
que siempre están de turno para el duelo.
De
modo que nos queda el desafío
de la cima mayor que, todavía,
nos falta descubrir o ser cobardes
y reclamar las
fotos del pasado,
aunque ni tú ni yo seamos esos,
aunque ningún ayer nos pertenezca
más allá de la niebla
que
dispone el recuerdo.
OIDOS
SORDOS
Un cielo casi azabache
me ha recordado
sus ojos negros,
mientras
la luna llamaba
su risa blanca
de mis infiernos.
Por qué te quita la vida
lo que te ha dado?
Por qué te
quita?
De qué me sirven las manos
si no las puedo
volver caricias.
Estrella que me acompañas
en esta noche
dile
si puedes,
que no dejo de buscarla
en cada cosa
que nos recuerde.
Patrona de las angustias
dame la dicha
de
que la encuentre,
bajo la sombra de un sueño
que se despierte
junto a mi muerte.
Por qué te quita la vida
lo
que te ha dado?
Por qué te quita?
Pone una flor en tus manos
y al poco tiempo
te la marchita.
CAMBIOS
Hoy soy poco de aquello
que una vez conociste,
ni los músculos firmes
ni los huesos indemnes.
Yo
mismo me doy cuenta:
mi mirada no tiene
el abrazo de antes,
se ha vuelto más esquiva,
prefiere estar distante.
Mi boca ha resguardado
el canto de la risa
y muy de tanto en tanto
le permite un paseo.
Soy un
conglomerado
de viejas cicatrices
que suelen dar dolores
cuando el día no es limpio.
Lo único que vive
para suerte sin cambios,
es la raíz primera,
la que marcó mi historia,
la que sigue nutriendo
en su esencia
a mis pasos.
La que me diferencia
lo bueno de lo malo,
lo oscuro de lo claro,
el amor del engaño.
Lo
demás, como he dicho,
ha cambiado sin dudas.
Si hasta a veces yo mismo
me sorprendo en las noches
con metralla
de estrellas,
sosteniendo una lágrima
cuando antes reia.
SOLTANDO EL HILO
Para qué
nos haremos preguntas sin respuestas?
Si nada positivo nos aportan
más aun
habitualmente dejan un resabio
que
puede perdurar
malogrando minutos que no vuelven.
Parecería mejor
soltarle algo de hilo a la cometa
y dejarla
que vuele sin censuras.
Puede volver airosa
o terminar su historia
entre la obstinación de algunas ramas.
De todos modos tuvo
su rato de jugar a ser gaviota
besando alguna playa que deseaba.
NO LO PODIA CREER
No lo podía entender
o no quería.
Esa calle fue mia
en muchos mediodías.
Las
veredas entonces
sabían de mis pasos,
que cruzaron, sin dudas,
a muchos de los pasos
que se habían vuelto lágrimas
de
pronto.
No lo podía entender
o no quería.
La barbarie no entra
dentro de mi maltrecho entendimiento.
No
se puede aceptar
tanta perversidad
sobre el anónimo.
Es algo que no admiten
los peores infiernos.
No lo
podía entender
o no quería.
La montaña de escombros,
los gritos, las sirenas
y las miles de manos
pretendiendo
el milagro,
no podían estar ante mis ojos.
Eso no era verdad
aunque lo fuera.
No me alcanzaba el llanto
para
tapar la pena.
SOBRE CRISTALES ROTOS
Se ha quebrado el cristal
donde ella reflejaba
cada vez que la puerta
de
mis sueños cedía.
El peso de las lágrimas
arrastró en su caída
el útimo suspiro
vestido con su nombre.
Comprendí que yo era
un pasado lejano.
Apenas quien creyó
que la espuma del mar
encontraba su puerto
para
volverse arena.
Enjuagué mi tristeza
con una brisa fresca
y dejé que los pasos
simplemente se fueran.
SE VE QUE NO SUPE
Se ve que no supe
brindarle sentido
a esta larga espera,
ni oponerle al frio
del
callado invierno
que arrastra las horas,
la tibieza justa
para que cobije
el nido su sueño.
Así marchitaron
aquellas
sonrisas
que habían florecido
en tanto desierto.
Quedaron dormidos
trinos y suspiros,
a merced del cauce
ignoto
del tiempo.
Ni siquiera viven
las últimas huellas,
parece que un viento
de tenaz empuje
se hubiera empeñado
en
dejar silencios.
La verdad no tiene
aristas filosas
ni encierra secretos
entre sus destellos.
Ocurre que
uno
cuelga su mirada
en aquel paisaje
que más lo conmueve
y tal vez no sea
paso de su senda,
agua de su
acequia.
Se ve que no supe
o no fue posible
recortar un trozo
de dicha y poblarlo.
Han quedado solo
ecos
y vestigios
de aquello que fuera
brote de un milagro.
Se apagó el murmullo,
terminó el presagio..
RESCOLDO
A veces, cuando en las noches,
el viento mece las ramas
y el cielo luce tan negro
como
el brillo de mi alma,
de la nada se aparece
frente a mis ojos su cara.
Como si fuera posible,
pongo a borrar
con su imagen
la nostalgia, compañera
de lágrimas que se escapan,
golpeando desde el silencio
con el filo de una
espada.
La llevo a poblar mi lecho
sobre las sábanas blancas,
para contarle las sendas
en que he sabido buscarla
y
mientras la noche afuera
reclama por sus guirnaldas,
como el rescoldo escondido
mi espera callada aguarda.
MINIMO
Pocas palabras
así
como te gusta
(y me gusta).
Un
vuelo de suspiros
la sonrisa que apenas
asoma su decir;
te quiero.
COMPAÑERA DE VIAJE
La soledad parece,
un laberinto incierto
tapizado de espinas,
en donde cada instante
encuentra como chance
el acicate frío
de los pasos perdidos.
Pasos que merodean
como sombras buscan
palidecer las ruinas
que aun perduran,
de aquello que fue luz
y hoy es silencio.
La soledad nos seca
la garganta y la voz
de tanto reclamar
callados nombres,
que a la resignación
le son esquivos.
Es un trozo de invierno,
que
agobia los retoños
capaces de soñar,
con cielos despojados
de
garras simulando
ser un brillo de estrellas.
Es
un hueco en el mar
donde se hunden las olas,
hasta perder las ganas
de arrimarle
su espuma,
a la arena que espera
con la tibieza abierta.
Es la porfiada lágrima
que busca algún lugar
donde anidar su historia
aunque no sea más
que en un simple papel
cargado
de palabras.
A LA LIGERA
Mañana húmeda,
de seguro refresca hacia la noche.
El circo de los dicen y contestan
usa el sitial de honor en los periódicos.
Algún secuestro más, se hace costumbre.
Un tipo ayer pensó
que no tenía caso
continuar:
se pegó un tiro.
Hay más armas que atletas para Atenas.
El horóscopo miente
que tengo por
delante un día perfecto.
Los chistes son mediocres
(a mi gusto).
Me fijo en lo importante
y recomienda:
"ante el éxito no creerse más de lo que somos",
no sueño tener fecha en ese examen.
AMNESIA
Doscientos sesenta y ocho,
alrededor de trescientos,
podrían
superar los cuatrocientos.
Cronología
de hechos anteriores
¿batiremos el
récord?
Posibles responsables,
penas previstas.
(silencio)
Lunes, martes,
miércoles, jueves.
¿Quizás viernes?
(el neón no es eterno)
Se
acerca el día del niño
y la siguiente
muestra
de amnesia sin excusas.
VIEJOS RECUERDOS
Es común la costumbre
de acumular recuerdos.
Amuletos, postales,
boletos capicúas,
medallas, baratijas,
relojes en desuso,
ciertas cartas de amor
y muchas cosas más
que, en cada caso,
optamos por guardar
sin más razón,
que darle alguna prórroga
a su paso en el tiempo.
De tanto en tanto,
cuando el cajón no tiene más espacio
para albergar pasados que golpean,
empezamos a ver
que parte de la historia disipamos.
Como frios verdugos sin capucha,
hacemos de algún cesto,
el destino final de todo aquello
que nuestro entendimiento determina.
Por qué no será asi
con los cielos que guarda nuestra mente,
aunque no tenga caso preservarlos?
Por qué es que no podemos
borrar lo que nos duele,
tirarlo por la borda hacia el olvido
y tapiar de una vez
y para siempre
cada ventana gris que nos opaca?
INCIERTO
Imperceptible aún
vaga el misterio
no hay huella singular
ni plano del tesoro.
Todas las sendas tienen
una parte
de acierto
pero no es suficiente
para el juego.
La luz
confunde
dibujando sombras
y el corazón ampara
hasta lo incierto.
MEDIANOCHE
Es medianoche y digo
el cauce de tus labios
con mis manos.
La
huella ha sido breve,
como el vuelo
de una hoja en otoño
hasta su lecho.
Enredado entre sombras,
intenta
el corazón
salir a flote.
El frio hiere más,
si el vacío arremete
contra todos los ecos
que uno espera.
Echo
a dormir
la última palabra.
SUCESIONES
Del andar cotidiano
de una palabra a otra,
irreverente
el tiempo
nos sorprende sin pausa
diseminando actos.
Entre ellos
los poemas
que siempre
marcan
el final de un instante.
Hay una sucesión desconocida
de futuras imágenes
que podremos mostrar
hasta el punto y aparte.
Después
el eco del silencio
renovará los sepias.
FUIMOS
Nos esperamos
en un rincón ajeno
a lo posible.
Bebimos
el rocío
para después
cubrirnos con la hoja
hasta que entibiase.
De espaldas al común
sin pretensiones
usando
los matices
que inventamos
absurdamente
fuimos.
ESCENARIOS
A
medida que el tiempo
carcome los pilares
que nos tienen enhiestos,
los ojos van cambiando
su horizonte.
El ayer se manifiesta inmenso
y el futuro es proyecto
con los pasos contados.
Vuelven a respirar
ciertas palabras,
que habían hibernado sin sentido
y las pequeñas cosas,
como los
nidos
tibios,
opacan a los fuegos de artificio.
POEMAS
Urde la mano
sobre el papel sediento,
la mágica armonía
de unas pocas palabras.
Espejos que transcurren
amalgamando instantes.
Secretos cauces
que vuelcan su torrente.
Estallidos de luz
que alguien comparte.
GOTAS
Duermen las palabras
en alguna penumbra.
Cuando un relámpago
fugaz
lo determine,
lloverán
gotas
sobre las manos fértiles.
(Un desierto papel
será testigo)
MADEJAS
Ausente o desbordado de misterios,
enredo cada paso
en viejas sombras
como si ejercitara la torpeza.
Cuando puede,
un recuerdo asombrado
escapa de su jaula
y
vuela a los cristales
de la única ventana que dispongo.
Desdibujado asoma
algún rostro sin luz,
entre ladridos
de
tanta soledad acostumbrada
a lastimar silencios,
para después,
palidecer con ellos
su destino.